El Ayuntamiento de Sant Josep de sa Talaia ha puesto en marcha un programa para habilitar vados farmacéuticos a los establecimientos apotecarios del municipio, seis en total. De este modo, se quiere facilitar la atención rápida de sus usuarios y garantizar un acceso rápido y seguro. A raíz de la pandemia, se ha valorado por parte del equipo de gobierno la necesidad de facilitar que la ciudadanía pueda ser atendida en las farmacias, consideradas un servicio básico en las actuales circunstancias. En el municipio de Sant Josep hay seis a pie de calle y otra situada dentro de la terminal del aeropuerto. Pero al contrario que en otros lugares, este municipio se caracteriza por la amplia dispersión de la población en zonas urbanas disgregadas, así que la mayoría no llegan a las farmacias a pie sino que tienen que usar el vehículo privado.
Ante la evidencia de esta situación, «a petición del propio colectivo farmacéutico, se ha considerado que lo más oportuno es habilitar plazas de estacionamiento lo más cerca posible a estos establecimientos, que proporcionan un servicio imprescindible que tenemos que facilitar que lo puedan prestar con las mínimas trabas», ha explicado el teniente de alcalde Vicent Roselló, que ha recordado que se trata «de una iniciativa pionera en nuestra isla».
Se da la circunstancia que todas las apotecarias situadas en núcleos poblados se sitúan en vías urbanas abiertas al tráfico y disponen de espacios de estacionamiento cerca. Pero estos aparcamientos son de varias tipologías, algunos son reservados en plazas de movilidad reducida, otras son de carga y descarga de mercancías y también hay situadas en zona azul de estacionamiento regulado -que en Sant Josep es gratuito-, con el que se constata que no hay un criterio urbanístico único ni ninguna normativa que regule y facilite el acceso a los usuarios de forma segura y accesible.
Además de los inconvenientes detectados por los usuarios, esta situación genera situaciones de riesgo cuando los estacionamientos próximos están ocupados, como es el caso de estacionamientos en doble fila en según qué casos de carácter urgente.
Ante esta situación generalizada, el Ayuntamiento se plantea unificar el criterio de estacionamiento en el entorno de los establecimientos apotecarios para facilitar la compra de medicamentos y que estos reúnan las condiciones de accesibilidad necesarias. Como primera medida, se señalizarán para el uso exclusivo de los clientes de farmacia dos plazas de aparcamiento en la ubicación más próxima al comercio, una reservada para personas con diversidad funcional y señalizada con el icono estandarizado de color blanco sobre fondo azul.
En cuanto a la otra plaza, esta quedará reservada para el resto de clientes. El tiempo de uso de estas plazas será el mínimo indispensable para la gestión a realizar con un tiempo máximo indicado a la señalización correspondiente, que será de 10 minutos. El horario privativo de estos estacionamientos regulados será el mismo en el que esté abierta la farmacia. Este uso reservado se indicará pintando en el suelo una señal de color blanco con la cruz verde.