El Ayuntamiento de Sant Josep ha presentado esta mañana sus presupuestos para el 2022, en los que la institución gestionará 41,3 millones de euros, los más elevados que ha tenido nunca la Corporación, de hecho un 3,6% más que los de 2021, cuando los presupuestos rondaron los 40 millones de euros. Además, es el primer año en que la cuenta general de Sant Josep presenta un endeudamiento cero, después de haber liquidado todas las pasivas pendientes a lo largo de este año.
El alcalde, Ángel Luís Guerrero, ha destacado en la presentación «la ambición de unas cuentas que son expansivas, como toca en un momento en que tenemos que recuperar el terreno perdido por la crisis». A la vez tienen «un fuerte componente social», con una dotación para el área de Protección y Promoción Social de 3,7 millones de euros «que baja sobre el año pasado pero sigue muy por encima de la demanda que teníamos antes de la pandemia. De todas maneras, la podemos aumentar si es necesario porque nuestra institución está más que saneada y dispone de un remanente líquido de 35 millones de euros en el banco».
Así, Guerrero, ha afirmado que estos «son unos presupuestos en los que las personas están en el centro, en más de un sentido». Al margen de las inversiones programadas para el 2022 y que siguen la línea del plan de mandato, «este es el primer año en que tenemos una partida de 450.000 euros que se gastará en lo que decidan los ciudadanos», culminando el proceso de los presupuestos participativos emprendido este 2021 y que apenas llega ahora a la fase de votación.
El teniente de alcalde de Economía, Vicent Roselló, ha destacado también «el realismo» que ha imperado a la hora de redactar la cuenta general de 2022, que ha definido como «libre de humo» porque «no hay más que la inversión que ya tenemos proyectada y no se han computado más ingresos de otras administraciones de las que están confirmadas a día de hoy».
También ha añadido que con la idea de mantener «una baja presión fiscal sobre la ciudadanía, después del complicado periodo de pandemia», por tercer año consecutivo «hemos optado por no tocar ningún impuesto ni tasa municipal, y tenemos que recordar que ya están al límite más bajo que nos permite la ley y nuestros vecinos y vecinas son de los que pagan el IBI más bajo de toda la isla, por ejemplo». Tampoco se incrementará la tasa de residuos por la entrada en servicio de la planta de triaje de Ca na Putxa, «porque hemos decidido asumir desde el Ayuntamiento esta subida con fondos propios para ayudar a ciudadanos y empresas a salir de la crisis, no es el momento de subir nada», ha dicho.
El hecho de no repercutir ni el aumento de precios por el IPC «es de hecho una rebaja que nos podemos permitir porque el Ayuntamiento está saneado gracias al rigor presupuestario de los últimos años, que hace que a día de hoy disponemos de un remanente de 35 millones de euros».
Rosselló ha reiterado que el equipo de gobierno prefiere invertir este dinero «en servicios para la ciudadanía» antes de que dejarlos en el banco. Así, y gracias a que en los dos últimos años se han relajado las reglas de estabilidad presupuestaria, se ha podido movilizar parte de este remanente e incorporarlo al presupuesto. «El año pasado pudimos incorporar 12 millones de euros al presupuesto inicial que teníamos, de 39,8 millones de euros, así que al final de año habremos gestionado más de 51 millones de euros».
Estos 12 millones incorporados mediante 14 modificaciones de crédito durante el ejercicio se han destinado sobre todo a inversión (8,5 millones de euros), además de liquidar la deuda que todavía tenía el Ayuntamiento (1,3 millones de euros) y a la mejora salarial que ha implicado la aprobación de la nueva Relación de Puestos de trabajo (RLT), que ha entrado en vigor este año después del acuerdo histórico con los representantes sindicales.
Roselló ha señalado también que a pesar de que las inversiones previstas bajan el próximo año, con 5,3 millones de euros, esta cifra crecerá «con la incorporación de los presupuestos participativos, que no hemos computado porque todavía no se ha decidido a qué se destinarán». Así, ha recordado que una de las condiciones de este programa de participación ciudadana es que «las actuaciones propuestas se tienen que poder hacer durante el año, así que todo se verá durante 2022». Tampoco se cuentan los fondos que se espera recibir de Europa a través de los Next Generation.
El teniente de alcalde también ha señalado que el año que viene se mantienen las ayudas al alquiler con los que se beneficia tanto a las familias como a los jóvenes que quieren emanciparse o los que estudian fuera del municipio (300.000 euros) igual que las ayudas para hacer frente a los gastos de escoleta (50.000 euros). «Esto sin olvidar las ayudas de emergencia para hacer frente a las necesidades básicas que puedan tener los ciudadanos en una dificultad puntual. Son unos presupuestos que siguen la máxima de que nadie tiene que quedar atrás en esta crisis», ha añadido.
Porque aunque en los presupuestos del año que viene la partida destinada a Protección y Promoción Social baja en 200.000 euros respecto a los de este año, todavía es la segunda cifra más alta que se ha destinado nunca en esta área, después del fuerte aumento del año pasado, y se dedicarán nueve céntimos de cada euro del gasto previsto.
Fruto de la congelación impositiva, los impuestos directos (IBI, Impuesto de actividades Económicas, Impuesto de Vehículos…) está previsto que generen 14.441.631 euros, el 34,96% del total de ingresos, con una bajada de 180.000 euros respecto al año pasado y una pérdida de peso en el conjunto de ingresos de casi dos puntos respecto 2021.
Lo que experimentará un fuerte aumento son las transferencias de capital, que aportarán 1,2 millones más que el año pasado pasando de 2,6 millones a casi 3,8 en el 2022. Este epígrafe engloba los sueldos que llegarán para las ayudas del Estado a raíz de la quiebra de Thomas Cook (1,2 millones de euros), el pago de la anualidad por las obras del CEIP Ses Planes de la consellería de Educación (495.662 euros), las aportaciones al proyecto de ordenación de la bahía del Impuesto de Turismo Sostenible y la parte que corresponde al Consell y el Ayuntamiento de Sant Antoni (380.000euros), 600.000 euros correspondientes a obras financiadas por el Consell y otro millón para el Plan de Mejora de la Sostenibilidad y Eficiencia Urbana.
Otros incrementos relevantes son los que se espera que reporten los impuestos indirectos (como el ICIO) a raíz de la reactivación económica y las transferencias corrientes, que incluyen la participación en los tributos del Estado los convenios previstos para promoción de la ocupación con el SOIB y otras aportaciones como la que tiene que recibirse del Fondo autonómico de cooperación municipal (300.000 euros) o los 390.000 para financiar las prestaciones sociales básicas.
En en cuanto al gasto, el capítulo de personal sube a los 11.334.006 euros, un 4,37% más que este año. Este incremento se debe al aumento general de sueldos por la nueva Relación de Puestos de trabajo (RLT) que ha entrado en vigor este año, la subida salarial aprobada por el Estado del 2%, las modificaciones en la plantilla previstas durante 2022 y el aumento de personal en los servicios sociales para cumplir las ratios de la normativa balear. Además, se prevé un volumen importante de contrataciones a través de los distintos programas de formación y ocupación que está previsto iniciar con el SOIB: Reactiva Sant Josep, SOIB Mujer, Jardines de sa Talaia…
También el capítulo de gasto corriente aumenta, en este caso un 14,45%, hasta los 22.147.479 euros, por la ampliación de servicios que han supuesto las últimas inversiones del Ayuntamiento, como la entrada en servicio del Auditorio Caló de s’Oli con el que implica de gasto de mantenimiento, dinamización y gestión, o el casal Xaire de Sant Josep. También el nuevo programa de gestión de residuos supondrá un incremento del coste, así como la ampliación prevista del mantenimiento del saneamiento municipal y la implantación de las medidas previstas en el Plan de Igualdad, como ejemplos.
También aumenta este gasto por la subida prevista del precio del servicio de tratamiento y eliminación de residuos que presta el Consell, que asumirá el Ayuntamiento, así como las adjudicaciones previstas del mantenimiento y conservación de carreteras, la recogida de animales abandonados, etcétera.
Las transferencias corrientes experimentan un reducción de 300.000 euros respecto a este año, hasta los 2,3 millones de euros. Esto se debe principalmente a que no se han incluido las partidas que se han aplicado por la atención a las personas afectadas por la COVID-19 una vez superado el peor de la crisis. Se mantienen ayudas al alquiler, los previstos para hacer frente a los gastos de escoleta y también se prevén las aportaciones al nuevo centro provisional de baja exigencia y al Fondo Pitiús de Cooperación.
Sant Josep mantendrá el resto de líneas de subvención como las que proporcionan los servicios sociales destinadas a cubrir las necesidades básicas (280.000 euros), las destinadas a clubes deportivos (150.000 euros), entidades culturales, asociaciones , etc.
En en cuanto a las Inversiones, se sitúan en los 5,23 millones de euros, una bajada del 20% que se quedará en el 11% una vez se decida el destino de los 450.000 euros de los presupuestos participativos (450.000 euros adicionales). En la planificación solo se han incluido actuaciones con proyecto redactado y se espera poder incrementarlas con la asignación de los fondos europeos a los que opta Sant Josep y con la modificación de presupuesto que se podrá hacer con la incorporación de remanente.
Equipaciones municipales:
-Nuevo centro de Mayores de Cala de Bou: 246.000 euros.
-Acondicionamiento integral edificio polivalente del colegio l’Urgell: 87.139 euros
Viario público
-Asfaltado calles de Sant Jordi: 300.000 euros.
-Remodelación tramo c. de la sindicalista Margalida Llogat: 55.000 euros
-Embellecimiento calle Murtra (2.ª anualidad): 1.067.906 euros
-Acondicionamiento calles des Caló y Cala de Bou: 493.354 euros.
Ciclo del agua:
-Mejora de la red de distribución: 500.000 euros
Movilidad sostenible
-Carril bici en la calle Vicent Serra: 47.689 euros.
-Adecuación y conversión para peatones del núcleo de Sant Josep (1era anualidad): 392.000 €
Medio natural y paisaje:
-Sistema recirculación agua marina: 326.481 euros
-Ordenación de la Bahía de Portmany: 437.083 €